
Gracias por tu amor, alegría y enseñanzas; dejas huellas imborrables en Cananea. ¡Siempre estarás en nuestro corazón! Te queremos, Julio.
Ganamos: millones de momentos más allá de los pronósticos; reflexiones profundas unas, y absurdas otras; aprender a reír de toda situación; abrazos de espíritu a espíritu; descubrir cómo seguirnos acompañando, ahora en distintas dimensiones; dar valor a cada segundo compartido... ganamos cada uno de nosotros, una huella imborrable que con tu vida y tu sonrisa nos has dejado.... ganamos el ser mejores personas —definitivo— tan sólo por el honor de conocerte y aprender de ti.
Colaborador y amigo de Casa Encuentro, Julio Medina.